sábado, 19 de noviembre de 2011

Algo mejor

¿Sabes cuando estas enamorado y el tiempo nunca es suficiente? ¿Cuando sientes que harías lo que fuera por la otra persona y no importa lo dificil o costoso que pudiera ser porque a su lado, nada es imposible? Cuando quieres a alguien, de verdad, no hay muro lo suficientemente alto, ni agujero no suficientemente profundo. Y ¿Sabes cuando esa persona por quien lo darias todo, sencillamente, no te corresponde? Suena feo ¿Verdad? Tan feo que antes que creerlo prefieres vivir engañada, tan doloroso que es mas facil inventar una historia diferente. Lastima que al final, el mundo real es mas fuerte y siempre te alcanza.
Al principio te preguntas ¿Por que a mi? ¿Es que yo no era suficiente? Es posible que incluso te culpes por ello. La verdad es que si esa persona se va, es porque no te quiere y no importa lo muchisimo que luches, la batalla esta perdida. Si de verdad le importases, tu no habrías quedado tan destrozada, nunca te hubiera hecho sentir tan mierda, tan nada, porque es mentira eso de que quien mas te quiere te hará llorar. Si huye cuando las cosas se complican, o no siente nada, o es un cobarde y ¿Quien quiere estar con alguien así?
Al principio se hace imposible, sales de casa porque no te queda otra, comes porque practicamente te obligan, y te despiertas por las mañanas porque no se puede dormir eternamente, aunque quisieras. Luego un día, ocurre algo, una tontería lo más seguro, y sonries, un segundo, y te das cuenta que recuerdas como se hacía. Seguro que llega un momento en el que incluso te descubres a ti mismo ilusionado por algo, lo que sea, y descubres que el mundo es demasiado grande como para renunciar a el por una sola persona. Sigue doliendo a horrores, sigues acordandote constantemente, seguramente sigues enamorado, pero eso ya no es lo unico que te define ahora, tienes más cosas. Entonces pasa algo, y todo lo que las personas que te quieren te dijeron cobra sentido, todos los " no merece la pena", los " nunca hubieras sido feliz con el", los "mereces algo muchisimo mejor", " se porto como un cabron"... Lo entiendes, de golpe y porrazo desaparece esa sensación de haber perdido lo más valioso del universo, adios a lo de llorar porque nunca encontraras a nadie como el, dejas de admirarle, de creer que era brillante, bueno... De seguir creyendo que en el fondo te quiere pero no pudo ser y algún día volvería. No vuelve.No vuelve porque si de verdad fuera a hacerlo no tardaría tanto.
Cada vez que te entren ganas de hablar con el, piensalo, si el de verdad quisiera hablar ya lo habría hecho. Deja de esperar que aparezca de nuevo, no ocurrirá. Piensa con la cabeza fría, ¿Esa persona es lo que tu necesitas? ¿Era capaz de hacer el ridiculo por la calle para sacarte una sonrisa? ¿Dejaba regalos en la puerta de tu casa cuando estabas triste porque sabía que eso te animaria? ¿Soportaba hasta tus mayores excentricidades, tus enfados, lo que sea, solo por estar a tu lado? ¿Organizaba planes como fuera para animarte a que salieras de casa? ¿Era capaz de recorrerse medio Madrid para buscar una farmacia de guardia y comprarte un Respir para que pudieras dormir?  ¿Merece la pena tanto dolor por alguien que simplemente parecia que te hacia un favor estando contigo, y lo que es peor aún, que creía que así era y que te permitía sentirte como si fuera cierto? Siempre es mucho tiempo para pasarlo con alguien así y afortunadamente, hay demasiadas personas en el planeta como para no poder encontrar a alguien que si haga todas esas tonterías por ti y lo mejor de todo es que aunque esa persona si mereciera todas tus lagrimas, jamas te haría llorar.
Las cosas ocurren una vez, y eso no es culpa de nadie, pero no dejes que ocurra de nuevo porque sería culpa tuya. De ahora en adelante, no te conformes con "lo que hay", no aceptes solo una disculpa, no vuelvas a llorar, ni a echar de menos a nadie que no fuera capaz de lo que sea por verte feliz.
Y si algún día volviera, si fuera cierto que te quería y se arrepintió, recuerda que tu has cambiado, y ya no te conformas con menos que todo, seguramente no fuera capaz de dartelo, ni tuviera ganas de desmotrartelo porque es mas sencillo darse por vencido que luchar, y si ni siquiera lo intenta ¿Por que ibas a creer que las cosas fueran a ser diferentes?
No fue tu culpa. Como tampoco fue la mia. Y no esta en nuestras manos el hacer nada. Deja de luchar por alguien que ya hace tantisimo tiempo que ha dejado de luchar por ti. Si estais destinados a estar juntos, no seras tu quien mueva la primera ficha, sencillamente aprende a vivir solo y te sorprenderá darte cuenta que poco a poco, quizá mas despacio de lo que quisieras, vas superandolo.
 No merece que le sigas queriendo, y tu te mereces algo mejor.

martes, 18 de octubre de 2011

La Comunidad

Todo en  la Comunidad parecía intentar hacerte sentir en casa, no era mas que una burda imitación de lo que alguna vez debió ser vivir en la Tierra, yo ya llevaba quince años  allí y no había dejado de sentirme extranjera, al fin y al cabo  aquello no era más que un enorme edificio de hormigón plantado en medio de un mundo que ya no nos pertenecía.
La gente sonreía, se esforzaba por olvidar que hubo un tiempo en que éramos libres, luchaban por ceñirse al presente y fingían disfrutar de las flores artificiales y la repugnante comida deshidratada, como si por el mero  hecho de aparentar felicidad fueran a conseguirla. A veces casi no podía contener las ganas de gritar, de hacerles sacar la verdad, de hacerles confesar que la vida en la Comunidad les desagradaba tanto como a mí. Pero pasaba el tiempo y todo seguía igual, nadie hacía nada, nadie se atrevía a expresar en voz alta lo que todos ocultábamos tras una sonrisa.
Recuerdo que en los primeros años, aún había quien hablaba de la vida antes de Ellos, de lo diferente que era y de cuanto la echaban de menos… Pero según pasaban los días, según iban perdiendo la esperanza de salir de allí, olvidaban, porque a veces el olvido es la mejor solución, sobre todo cuando ya no quedan fuerzas para luchar.
Ellos no eran muy distintos de nosotros, eran nuestra versión mejorada, eran el producto de nuestra ambición y nuestra mayor derrota. Los hombres no podemos conformarnos con lo que la naturaleza nos ofrece, buscamos mas, buscamos la perfección, no podíamos concentrarnos en disfrutar, teníamos que ir más allá. ¿ De verdad somos los  seres vivos más perfectos de la creación?  Me cuesta mucho creerlo, nuestro inconformismo nos hace infelices, y peligrosos.
Todo empezó con nuestra obsesión por combatir la muerte, quisimos ser inmortales, y dejamos de ser humanos, dejamos la naturaleza a un lado, y nos metimos en un laboratorio. Nuestro propio nacimiento dejo de ser algo natural, comenzó a ser algo programado, estudiado, nuestros progenitores podían elegir nuestro color de pelo, nuestra estatura, nuestro coeficiente intelectual e incluso podían hacernos inmunes a cualquier enfermedad. Así nacieron ellos, son perfectos, no enferman, son increíblemente hermosos y nos han expulsado de nuestro propio hogar.
Son tan superiores que no veían la necesidad de compartir su espacio con nosotros, los imperfectos, inferiores en todos los aspectos. Somos pocos los hombres que quedamos sin perfeccionar, somos pocos los que aún debemos nuestra existencia a nuestros padres y no a una probeta, que somos el resultado de la genética y no de una serie de cálculos matemáticos, somos pocos y todos vivimos aquí, en la Comunidad, el único lugar que Ellos aún no han ocupado.
Luchar es inútil, cada cierto tiempo enviamos un ejército a buscar otros supervivientes, nunca vuelven. Es cuestión de tiempo que nos descubran y acaben con nosotros definitivamente. Solo tratamos de hacer la espera lo más confortable posible, fingiendo que la Comunidad es algo más que un escondite suficiente .Sé que soy afortunada, y se que no  debería quejarme de mi situación, fui una de las últimas imperfectas que lograron traer con vida, según me han contado, estaba sola, lo más probable es que mis padres ya hubieran muerto pero Ana se hizo cargo de mi. Podría haber terminado en la casa de huérfanos pero ella lo impidió, no sé exactamente qué es lo que la impulsó a hacerlo, ni por qué me escogió a mí y no a cualquier otro niño. Solo tenía cinco años cuando me trajeron, no soy capaz de recordar nada de mi vida pasada, solo tengo la certeza o la esperanza tal vez, de que era mejor que aquello, siempre espere que hubiera algo mejor y ahora con mis veinte años, sigo esperando. Ana tiene una pequeña tienda de ropa en  la Comunidad, es un buen negocio, sencillo, pero nos da de comer, trabajo con ella todas las tardes y dedico las mañanas a la universidad. Voy a la facultad de humanidades a estudiar Historia, siempre tuve muy claro que era eso lo que quería hacer, me siento irremediablemente atraída hacia el pasado, hacia cualquier cosa que no   tenga que ver con mi realidad presente, nunca se sabe, tal vez conociendo todo lo que nos ocurrió a lo largo del tiempo pueda entender exactamente lo que nos ha conducido aquí. Ana siempre me dice que no es bueno vivir pendiente de las cosas que ya pasaron y no podemos cambiar, pero yo creo que esa es la única solución cuando vives un presente que te desagrada, una manera de escapar. Nunca he sido una persona fácil de tratar, siempre he sido distinta a los demás, he pasado mi vida entera enterrada bajo un montón de libros antiguos, evitando cualquier contacto con el resto, ellos no me entienden y tampoco se molestan en hacerlo, odian la manera en que yo hablo del mundo exterior, porque les obliga a pensar, y tal vez, a añorar tiempos mejores. Prefieren fingir que no hay nada más allá de las paredes de la Comunidad y rechazan a cualquiera que pretenda sacarles de su error.
 Vivía con Ana en uno de los pisos inferiores, no era ni demasiado grande ni demasiado pequeño, era como todos los demás apartamentos de la zona, allí teníamos todo lo que necesitábamos. Ella siempre respeto mis excentricidades, me apoyó cuando los demás me dejaron de lado, nunca llegue a conocer a mi madre pero no creo que hubiera podido cuidarme mejor de lo que Ana lo hizo, ella es lo único bueno que puedo sacar de mi vida en la Comunidad y el único motivo por el que seguía allí.

lunes, 10 de octubre de 2011

Tu carta

Encontré tu carta en el fondo de mi armario y me hizo sonreír, porque ahora si lo entiendo, ahora si lo veo. Tenías razón, siempre la tuviste, y te diste cuenta antes que yo. Soy feliz ahora ¿Sabes? Como tú me dijiste que sería… Solo siento no haber confiado en ti desde el principio.
Perdí mucho el tiempo, hice mucho el ridículo, otra vez, como pasó contigo, pero no va a volver a pasar. Aprendí que no hay nada lo suficientemente valioso como para ponerlo por delante de mí, que no soy tan complicada, ni tan estúpida, que el fallo no era ese, que simplemente no era él, ni eras tú, pero ya aparecerá.
Ahora si se lo que necesito, y no voy a conformarme con menos que todo. Será alguien tan valiente que no le importe enfrentarse a lo que sea por estar conmigo, alguien que haga frente a los problemas a mi lado, aunque parezca el camino más difícil. Yo podré ser yo misma con él, porque será eso lo que quiere, y no me avergonzare ni siquiera de mis mayores excentricidades, porque hasta eso le gustara de mí. No me humillaría jamás, porque nunca se daría la situación, porque nunca me sentiría de menos. Y si nunca lo encuentro, si no fuera capaz de encontrarle, ni siquiera me importa, no me siento más sola de lo que me sentía contigo, o con él, sé que estoy en donde debo estar, y que este es el camino correcto.
Me ha gustado leerte, y no voy a negar que a veces te echo de menos,  a pesar de todo el tiempo que ha pasado, y de todas las cosas que he vivido… Tú siempre supiste ver lo que había dentro de mí, y no te costaba entenderme, aunque eso no fuera suficiente. Somos demasiado parecidos, demasiado extraños y demasiado difíciles como para poder ser felices el uno con el otro por muchas ganas que le pusiéramos. No te guardo rencor, no pudiste, no fuiste capaz… Pese a todo no puedo negar que sí, una parte de mí siempre te pertenecerá, por todo lo que fuiste y porque sigues siendo la persona que siento más cerca, aun estando muy lejos.
Ojalá te encuentre de nuevo… Ojala me escribas más cartas… Ojala que siga sintiendo al leerte lo mismo que he sentido ahora. Hay pocas cosas especiales en la vida, y una de las de la mía está contigo, aunque no haya podido ser.
No debí irme, pero tampoco podía quedarme. Ahora tengo que hacerlo por mi cuenta, y lo sabes. 

martes, 2 de agosto de 2011

Palabras



Las palabras son fácilmente pronunciables, y es muy sencillo hablar, incluso aunque no se tenga nada que decir. Nos cuesta permanecer callados asi que pasamos la mayor parte del tiempo diciendo cosas, cosas que generalmente no significan nada, que no importan, cosas que solo sirven para romper el silencio, que por ser mas revelador que todas las palabras que podamos pronunciar nos asusta. 
Hablamos tanto que dejamos de pensar lo que decimos, las palabras van perdiendo todo su valor. He aprendido que quizá la mejor manera de comprender a alguien no sea escuchando las cosas que dice, sino observando las cosas que hace y interpretando las cosas que calla. 
La mayor parte de las conversaciones de mi día a día carecen de sentido real, a veces ni siquiera reflejan lo que siento por dentro, hablo de mil cosas solo para tapar las cosas que verdaderamente me preocupan. Lleno de palabras huecas mi cabeza porque para las cosas que verdaderamente me gustaría expresar nunca encuentro las palabras adecuadas y los hombres ya se sabe que no somos buenos resistiendo la frustración. 
Hablando tanto a veces parece que eso es lo único que cuenta, pero solo es un engaño. Muchas veces me han dicho " te quiero " y pocas me lo han demostrado de verdad. Hablar es fácil, sentir lo que se dice, eso es algo mas complicado. Lo peor no es la manera en que engañamos a los demas, sino la manera en que nos engañamos a nosotros mismos, lo peor no es decir cosas que no sentimos sino que de tanto decirlas olvidamos eso que sentimos realmente. 
Yo he dejado de confiar en las cosas que oigo, me fío únicamente de las cosas que veo, y de las que siento, no las que pienso no, las que se que estan ahi porque las noto en el estómago, solo de esas puedo estar segura. 
Una mirada nos lleva mas lejos, que todas las palabras del universo juntas, y el sentir que le importas a alguien, no depende de cuantas veces te lo digan, sino de la certeza de que esa persona va a estar a tu lado, aunque no te lo haya dicho nunca. 

miércoles, 6 de julio de 2011

Soñando quizas...

Tiemblan, las paredes se derrumban y todo se me viene encima. Me cuesta respirar y me faltan ganas para salir corriendo. Me abrazo las rodillas y cierro los ojos tratando de desaparecer un rato de alli. Cuento hasta diez y como no es suficiente, hasta cincuenta y asi sucesivamente hasta que siento que las cosas han dejado de importarme. Todo sigue derrumbandose ahí fuera pero aqui dentro se siente bien, el tiempo no pasa, las heridas no duelen, siento como los latidos de mi corazon retoman su ritmo habitual y me dejo llevar por esa sensacion de calma artificial.
Imagino sonrisas, miradas que significan algo, musica, el sabor de todos los besos que aun no me han dado, una casa con un gran porche y un golden retriever, el vestido que aun no me he comprado y la manera en que ese chico que aun no he conocido me mira mientras duermo. Sueño el baile al que siempre he querido asistir, y la sensacion de sentirme verdaderamente arropada por alguien, sueño con un lugar que no existe pero que siempre he querido ver y sin querer se me ocurre soñar que alguien esta soñando conmigo.
Se me ocurren mil historias, cuentos de hadas, de principes y princesas y de como de alguna manera todo acaba bien.
Abro los ojos de nuevo y debo haberme quedado dormida porque ya es de dia, no hay ni rastro de todas esas cosas que invente para mi, pero no dejo que eso me hunda. Los sueños pueden hacerse realidad siempre que no dejes de soñarlos, y todas las cosas que yo soñe existen, y son mias, y quien sabe, quiza algun dia se conviertan en algo real. Mejor no darse por vencido, por si acaso.

domingo, 12 de junio de 2011

Lo perdimos

Lo hemos perdido...
El mundo parece mucho mas complicado ahora que no puedo esconderme bajo tus sabanas.... Más grande, o quiza yo me sienta mas pequeña. Se sentía bien  a tu lado, las palabras sobraban, la ropa sobraba... A lo mejor ese fue el problema, olvidamos que la vida avanzaba mientras nosotros estabamos alli metidos. Eramos jovenes, olvidamos que lo que pasaba fuera tambien importaba.
Yo importaba... Lo olvidaste, y yo lo olvide tambien.
Supongo que me sentía tan completa abrazada a ti que nunca pense que yo sola pudiera ser suficiente. Eras lo unico, lo primero y lo ultimo. 
Te fuiste, y senti que todo se venía abajo, en mi cabeza todo eran cosas que ya nunca podrían ser, cosas que fueron. Es curioso hacia tiempo que te había perdido aunque aún pudiera besarte... Lo sabía pero aún así no podía parar, era lo único que sabía hacer. Cuanto mas me acercaba, pese a todo, pese al dolor que sentía, pese al daño que me hacías, más te alejabas. Y lo entiendo, ahora lo entiendo.... Tu supiste ver mucho antes que yo que hacia tiempo no era feliz, solo tenía miedo. 
Fue muy dificil para mi darme cuenta que podía estar sin ti. Aún mas dificil darme cuenta que podía ser feliz sin ti.... Pero lo que mas me costo fue darme cuenta que no estaba sola. Yo importo, me importo a mi misma y le importo a la gente que me rodea... 
De pronto me vi siendo fuerte, independiente, segura, me vi escribiendo en un blog, sacandome mi carrera y sonriendo... Tenías razón no te necesitaba para todo eso... 
Ojala tu imagen de mi no estuviera tan degradada, estarías orgulloso de mi. Ya no tengo miedo a nada. Pase lo que pase con mi vida, este triste o este contenta, te eche o no te eche de menos, eso ya no es lo único que tengo... Se que nunca voy a estar sola. 
Y todo eso es gracias a las personas que han estado ahi conmigo, que me han visto comportarme como una imbecil, caerme, llorar, lamentarme, y han estado ahi pese a todo.... Me han sacado de casa cuando ha hecho falta, han hecho el bobo para sacarme una sonrisa,  me han enseñando que el mundo esta lleno de personas maravillosas y no me puedo rendir por una sola. 
Te gustaria de veras verme así, pero se que tambien te va a gustar leerlo. Vuelvo a ser la chica que era pero mejor aún, porque ahora les tengo a todos ellos. 
Y por eso el final de esta entrada se lo dedico. 
























Gracias, porque he dejado de llorar y sonrio cada vez que pienso en vosotros. 

lunes, 6 de junio de 2011

Frio


Meto las manos en los bolsillos y no importa el calor que haga fuera, dentro hace frío. Aún así no las saco, me gusta pensar que si las caliento servirá de algo.
Esta lloviendo, lo se porque puedo ver el impacto de las gotas sobre los charcos, deduzco que también caen sobre mi, pero no me importa. La gente a mi alrededor camina deprisa, supongo que tienen a donde ir, yo me quedo ahí parada, mojándome, porque cualquier otra cosa me parecería igual de absurda que eso.
Acaba una canción en mi ipod, y empieza la siguiente, parece que todo avanza, aunque yo no lo haga.
Una niña acaba de resbalarse un poco mas adelante, y su madre corre a ayudarla, la envidio, no por el golpe, la envidio porque seguramente ese sea el único motivo de su llanto, porque dejara de llorar pronto, quizá con el beso que acaba de darle su madre, o con cualquier otra cosa, pero pronto. Cuando ella sonría de nuevo yo seguiré aquí en el mismo sitio.
Antes me gustaba la lluvia, pero claro, antes no me daba todo igual, antes cuando salia de casa era para ir a algun lado, antes.... Las cosas eran tan diferentes antes.
Me doy cuenta de que podría llorar y nadie se daría cuenta, ya tengo la cara empapada de todos modos, pero tampoco le veo sentido a eso. Tambien podría volver a mi casa, porque todo esto que estoy escribiendo es ahora practicamente ilegible y tambien esta empapado. Es curioso, yo estoy igual de inservible que este papel...
Mi móvil acaba de sonar, y lo cierto es que siento unas ganas enormes de sacarlo del bolso y estamparlo contra la pared, odio el maldito movil, porque suena cuando no quiero que lo haga y no lo hace cuando lo necesito, y porque en estos momentos odio a todo el mundo.
Al menos tengo ganas de hacer algo.
No lo hago, de todos modos, simplemente lo saco y lo silencio, es mi manera de contactar con el resto del planeta, aunque me sea indiferente, dado que sigo viva, es lo que se supone que debo hacer.
La verdad es que todo es tan ridiculo cuando solo observas sin participar en ello que casi podría reir si no doliera tanto.
Podría levantarme y bailar, o chillar, podría saltar de charco en charco y escupir al suelo... Al menos así rompería con la puta rutina del día a día con las idas y venidas a tal o cual sitio, con la espera, con las obligaciones, con mi vida.
Tampoco lo hago, no porque sienta verguenza, sino porque escapar de toda esa mierda por un instante no hace menos llevadera la inevitable vuelta a la realidad.
De hecho, como se hace tarde, voy a volver a casa, me dare una ducha caliente y seguiré teniendo frío.


sábado, 4 de junio de 2011

:)





http://www.youtube.com/watch?v=he4aAalSEzs

http://www.youtube.com/watch?v=ZxqmybOAKGg

http://www.youtube.com/watch?v=wIi4Ynj1raA

lunes, 30 de mayo de 2011

Gracias



Ayer, sin querer, casi sin darme cuenta, sonreí, y fue de verdad. Puede parecer algo insignificante, una estupidez, y tal vez lo sea, no lo se... A mi me pareció algo importante, al menos algo diferente, hacía tiempo que había dejado de ser la chica que sonreía. La verdad es que sigo sin tener ni idea de que quiero hacer con mi vida, sigo teniendo insomnio y aún me duele, pero no pensé en ninguna de esas cosas mientras sonreía, se me olvidaron, y es extraño, porque recordar era prácticamente lo único que hacía últimamente.
Alguien me dijo que si dedicaba diez minutos de mi día a pensar en las cosas buenas que me habían pasado, me sorprendería, y me pareció solo una manera mas de comprobar el poco sentido que tenía todo, y de hecho así fue, al principio. Lo cierto es que cada día encuentro mas cosas buenas, aún no son grandes cosas, pero procuro pensar en ellas cuando me levanto y esta bien, o al menos parece que lo estará. Creo que esa persona merecía una mención en mi blog, y un sincero agradecimiento por mi parte, porque era fácil darme por un caso perdido, lo difícil era conseguir que volviera a creer en mi misma, y en que todo merece la pena. Lo conseguiste, lo conseguí...
Gracias a ti se quien quiero ser, quiero ser la  chica que conociste, la chica que ves en mi y que parece que todo el mundo ha olvidado. El hecho de que creas que detrás de toda esta inseguridad, y este complejo de inferioridad patológico, sigue estando esa chica fuerte que se que fui, y que estas seguro que volveré a ser... Significa muchísimo para mi.
Esa sonrisa, solo será la primera de otras tantas sonrisas que no podré evitar esbozar de ahora en adelante, y todas y cada una de ellas serán gracias a ti. Tu no te has rendido conmigo... ¿Por que iba a hacerlo yo?
Muchas gracias, de verdad, por seguir siendo tu primera opción pese a no ser la opción mas fácil.
Cuando leas esto estarás muy lejos... Te deseo mucha suerte allí. Espero que algún día, dentro de unos años, nuestros caminos vuelvan a cruzarse por casualidad, y que esta vez, sea mejor momento.

miércoles, 18 de mayo de 2011

18

Y hoy si es para ti, porque hoy es 18




http://www.youtube.com/watch?v=-ztZhKFFfEs

martes, 17 de mayo de 2011

Nimm



- Niña ¿Por que lloras?
Una mujer de mediana edad se había arrodillado junto a mi y me observaba, parecía francamente preocupada. No fui capaz de contestarla ¿Que iba a decir? ¿Por donde podía empezar? Aparté la vista y seque mis lagrima con el dorso de la mano, en un intento absurdo por calmarme.
- Vamos, ven, hace un día precioso no te quedes ahí tirada
Tomó mi mano entre las  suyas, eran ásperas, fuertes, manos de campesina. Me sentí extrañamente reconfortada de pronto, segura. Me puse en pie con dificultad y la observé,  me basto un simple vistazo para admirar profundamente a aquella mujer y confiar plenamente en ella aun sin conocerla de nada. Su rostro, ligeramente arrugado por los años seguía siendo hermoso, sus ojos claros, fijos en los mios, no transmitían sino bondad, y quizá fuera eso lo que me impulsó a abrazarla, tal vez fuera por el modo en que me mirada, o por su media sonrisa, pero de pronto, me di cuenta que no podría encontrar aunque quisiera lugar mejor donde estar en aquel momento que allí metida, entre sus brazos. Me sostuvo con cuidado, casi me atrevería a decir con cariño tratando de tranquilizarme, no parecía tener ninguna prisa por soltarme, y yo por una vez en mi vida, me dejé ayudar, porque no me quedaban fuerzas para seguir.
- ¿Sabes? Ese vestido que llevas esta hecho un desastre, antes que nada deberíamos buscarte otra cosa que ponerte
Me sorprendió que no indagara sobre los motivos de mi desgracia pero lo agradecí en silencio forzando una ligera sonrisa y dejándome conducir por el sendero hasta el pueblo y de allí hasta su casa. Aquel lugar era tal y como pude haberme imaginado que sería, una vivienda humilde y acogedora, cerca de la plaza. Me hizo sentar en uno de los sillones de la salita y sin dejar de sonreír se marchó a preparar algo de comer. Me sorprendió la cantidad de libros que tenía, tantos que ni siquiera le cabían en las estanterías y yacían por el suelo, en pequeños montoncitos, resultaba curioso que una mujer de su edad y posición supiera leer por lo que inmediatamente pensé que estaría casada. No fuí capaz, sin embargo, de encontrar en aquella estancia ni una sola cosa que pudiera pertenecer a un hombre y eso me hizo admirar aún más a aquella extraña mujer que sin conocerme de nada había decidido ayudarme. Era una habitación pequeña, una chimenea, un par de sillones y una mesita de madera ademas de los estantes y los libros, lo cierto es que me hubiera encantado poder decir que aquel era mi hogar, aunque dada mi situación me hubiera bastado con tener un hogar, fuera cual fuera.
- El otro día compré un queso estupendo en el mercado y aún me queda algo de pan del almuerzo, has tenido suerte, normalmente no tengo gran cosa que ofrecer a los invitados.
- Muchas gracias, no tenía por que haberse molestado
- ¡Por Dios niña! No me trates de usted me hace parecer mas vieja de lo que soy, me llamo Dana  y así es como debes llamarme. ¿Y tu nombre es..?
No podía decirle mi nombre, seguramente hubiera sabido quien era... O al menos quien había sido. Estaba completamente bloqueada de pronto, no es que no conociera un montón de nombres humanos que hubiera podido utilizar, es que estaba cansada y me dolía la cabeza y no era capaz de pensar con claridad. Afortunadamente  Ana me saco del apuro, de nuevo.
- Bueno ¿Que te parece Violeta? Es un nombre que siempre me ha gustado ademas de ser mi flor preferida, y no conozco a nadie que se llame así es un nombre poco común, no conozco a nadie que lo pudiera llevar mejor que tu. De alguna manera tendré que llamarte.
- Sí, Violeta esta bien.
De nuevo me sorprendió que no indagase, el hecho de no querer dar mi nombre no era indicativo de nada bueno y sin embargo a ella no pareció importarle demasiado, mas bien parecía encantada con la idea de ponerme nombre. Depositó la bandeja con la comida sobre la mesita y comenzó a cortar el queso  y el pan. Una vez hubo terminado me tendió una rebanada de pan con una loncha de queso encima y se sentó en el sillón de al lado, observando como devoraba aquello. Hacía días que no probaba bocado y ni siquiera lo había notado, ahora, sin embargo, me había entrado el hambre de golpe.
- Madre mia que desastre de mujer soy, no te he traído agua ...
- No se preocupe, ya esta haciendo demasiado por mi
- Nada de terceras personas... Eso es para desconocidas, y después de ponerte un nombre me considero algo más que eso.
- Claro... Dana
- Así me gusta, ahora mismo vuelvo.
Volvió a la cocina dejándome sola de nuevo, yo no podía parar de engullir pan con queso y apenas me concedía tiempo a respirar con lo que me atraganté un par de veces, agradecí el agua cuando finalmente me la trajo. Me tendió el vaso y volvió a tomar asiento. Me lo bebí de un trago y seguí comiendo hasta terminar con todo lo que había, me sentí inmediatamente avergonzada.
- ¡ Cuanto lo siento ! No te he dejado comer nada
- No te preocupes, creo que te hacía mas falta que a mi. ¿Cuanto hacía que no comías?
- Un par de días...
- ¡ Por Dios! Eso es terrible, quizá debería traerte algo más...
Se puso en pie con la intención de regresar a la cocina pero lo cierto es que además de parecerme descortés , no hubiera podido comer ni una sola cosa más, había empezado a dolerme el estómago.
- No hace falta, de verdad, estoy llena, gracias de todos modos.
- Bueno como quieras dime ¿Cuantos años tienes?
¿Que cuantos años tenía? No lo sabía.... Pero a partir de ahora debería saberlo, era mortal, envejecería, moriría... Toda aquella información me vino de golpe y rompí a llorar de nuevo. Ana cogió mi mano cariñosamente.
- No te preocupes, no llores...
- La verdad... No se cuantos años tengo
Quizá fue un error decirle aquello, pero solo me salía ser sincera con ella, me parecía terriblemente injusto mentirle después de todo lo que estaba haciendo por mi, no podía saber quien había sido yo, pero al menos le diría la verdad dentro de mis posibilidades. De todos modos ya no importaba, no volvería a ser Nimm nunca más y ya no volvería a ser un hada, solo era Violeta, una mortal normal y corriente. Si quería empezar de cero, no lo haría sobre un montón de mentiras.
- ¡ Que suerte ! Ojalá no supiera yo la edad que tengo..
Por primera vez desde que perdí las alas sonreí, y no por agradarla, sonreí porque quise y porque me salió así, sin más. Sonreír sentaba bien, lo había olvidado.
- Vaya si sabes sonreir... Deberías probar a hacerlo mas a menudo. Dime Violeta ¿Que es lo que te ocurre?
- Yo... Me tuve que ir de Elrion. Allí no me quedaba nada.
- Así que ¿Eres de Elrion? Tiene sentido claro... esta ciudad esta pegada a la frontera y no me sonaba haberte visto por aquí, de haberlo hecho, creeme, recordaría un rostro tan peculiar como el tuyo. Yo nunca he estado en Elrion pero me han dicho que es precioso
- Lo es.
- ¿ Por que dices que no te quedaba nada allí ?
- Cometí muchos errores, me enamoré, me equivoque y bueno, me quedé sola, él se fue y yo... Tenía que salir de allí. Estoy  sola...
- Siento oír eso. Entiendo que quisieras irte, aquí donde me ves también yo tuve un gran amor que me salió mal... Ojalá hubiera sido tan valiente como tu y me hubiera atrevido a cruzar la frontera, lo cierto es que me quedé aquí y mi vida no ha sido muy interesante desde entonces, como podrás comprobar.
- Tengo tanto miedo...
- Lo se, pero el miedo pasará eres joven, y fuerte.
- No se si puedo hacerlo sin él
- Podrás porque él no esta aquí, y tu no vas a rendirte por eso.
- He estado a punto de hacerlo
- Ahora estás aquí y aquí te vas a quedar. No me viene nada mal algo de ayuda ¿Has visto todo este desorden? A cambio de que me limpies la casa y hagas la comida, te dejo vivir y comer aquí, que no es que sea gran cosa, pero es todo lo que puedo ofrecerte.
- No puedo aceptarlo, no merezco algo así.
- Todos cometemos errores, pero eso no nos define, un error no nos hace ser quienes somos, deja de torturarte niña, tienes mucho tiempo por delante para demostrar quien eres de verdad, y se que merece la pena acogerte en mi casa y tenderte mi mano, y yo nunca me equivoco.
- ¿Por que haces todo esto?
- A lo mejor porque yo también estoy sola
Estaba siendo sincera conmigo, lo leí en sus ojos, puede que ya no fuera un hada pero no había perdido la facultad de ver a través de la gente y aquella mujer me estaba hablando en serio. Me di cuenta que ella me necesitaba a mi de la misma manera que yo la necesitaba a ella. Y en mi corazón, deje de sentir que no tenía a nadie, y empecé a tener a Dana.

lunes, 9 de mayo de 2011

Se acabo

No era tan complicado, no debia doler tanto, no fue cosa del destino,ni tiene solucion.
Fuiste tu y fui yo, nosotros mismos.
Fueron las cosas que hiciste y mi empeño por disculparte, todas mis ganas y tu ausencia de ellas, fue porque no me querias suficiente y tal vez yo lo hacia demasiado.
Quiza tu no podias dar mas y yo nunca debi conformarme con menos.
El dolor puede desaparecer pero no se olvida y tu siempre me veras igual aunque yo no pueda ser la misma, y no volvere a creer, ni a confiar, no volvere a tener tantas ganas ni te querre tanto.
Tu siempre tendras miedo, y yo no tendre las mismas fuerzas
Si finalmente el tiempo volviera a juntarnos, no seria lo mismo sino otra cosa diferente, tal vez mejor,tal vez peor,pero nuunca seria igual. Siempre echare de menos aquella version de nosotros, pero se acabo.

martes, 3 de mayo de 2011

Ella



Ella tiene miedo, miedo a no ser felíz
a perder aquello que le importa, a quedarse sola.
pero sobre todo tiene miedo de sí misma
por no saber controlar lo que siente,
porque en el fondo sabe que es la única culpable
de todo lo que le pasa.
No sabe lo que quiere, pero le falta algo, siempre le falta algo.
Llora, pide ayuda esperando que alguien la haga sentir mejor.
Busca en los demás el cariño que ella no es capaz de tenerse.
Esta llena de amor
pero aún no ha aprendido a quererse a si misma.
Ella no entiende...
que no merece la pena buscar respuestas
hasta que no aprenda a formular las preguntas adecuadas.
No es tan terrible el mundo, como ella lo ve,
ni tan vacio, no es tan dificil, ni tan injusto.
Y es tan capaz como el resto,
de encontrar su lugar, de seguir su camino
y recuperar la sonrisa, solo que aún no se ha dado cuenta.

sábado, 30 de abril de 2011

Tiempo




Tiempo, que pasa, que se desvanece, el tiempo, que siendo finito, a veces parece demasiado y otras falta, pero nunca se detiene, y no permite marcha atrás, fluye, sigue adelante, aunque tu no lo hagas. 
Temo despertarme una mañana, y darme cuenta que lo he perdido, y se me ha escapado, se ha llevado todas las cosas que quería hacer y nunca hice, la esperanza... Cada segundo vacío, cada hora desperdiciada, cada cosa que pudo ser y nunca fue pese al tiempo que invertí en ella, pesa, me oprime, me asusta. Me duele lo que ya ha pasado, y que por mas que añore, no va a volver a pasar y me paso el tiempo recordando, y así no vivo lo que tengo que vivir cuando debo, y sigo perdiéndolo.... Sigue pasando. No puede esperarse un gran futuro de alguien que vive anclado al pasado, ¿Verdad? 

lunes, 11 de abril de 2011

Punto y final



Lunes, otra vez Lunes, otro día más sin verte, otro montón de horas pensando en ti. ¿Cuando acabará todo esto? Tal vez fuera menos duro si supiera que tiene un final.
No me valen las promesas vacías de quienes no tienen ni idea de lo que estoy pasando, no me valen los "date tiempo" ni los "estas mejor sin el" ¿Ellos que saben? ¿Acaso tienen idea de lo dificil que se me hace levantarme cada mañana y fingir que tengo ganas de seguir adelante? Porque no las tengo, ninguna. ¿Para que? ¿Para pasar otro montón de días mas recordandote?
Quiero una fecha de caducidad, solo eso.

martes, 5 de abril de 2011

Siempre

Cierro los ojos tan fuerte que hasta me duele, como si así pudiera retenerte. ¿Como he podido olvidar tu olor? ¿Como es posible?  ¿ Como puedo haber olvidado el tacto de tu piel si aún puedo recordar lo bien que me sentía cuando me abrazabas?
No soy capaz de acordarme pero lo siento, así que tiene que estar ahí, en alguna parte, y me niego a abrir los ojos, como si el hecho de hacerlo fuera a hacerte desaparecer. Y yo no quiero, es lo único que me queda.
Intento visualizarte y no puedo, pero se que estás porque aún soy capaz de sentir tus besos, como si nunca hubieras dejado de besarme, sin necesidad de esforzarme puedo incluso recordar lo bien que encajaban nuestras manos al entrelazarse, como si estuvieran hechas para estar una agarrada de la otra.
Y te quiero, con la misma intensidad que siempre, como si no te hubieras ido, y aunque no puedo reproducir con exactitud el sonido de tu vos siento que lo único que deseo de verdad es oírte decir que tu también me quieres a mi, y que sea cierto.
Finalmente abro los ojos, porque al fin y al cabo el mundo no se ha detenido conmigo, pero tu sigues estando ahí, aún sin estarlo. Y sonrío, porque comprendo que por muchas cosas que olvide, nunca podría olvidar lo que siento por ti, y no importa a donde vaya, ese sentimiento siempre vendrá conmigo, y no hay nada que pueda arrebatarmelo.

domingo, 3 de abril de 2011

Nimm





- Despierta, vamos, despierta ya

Oigo su voz pero no presto atención a sus palabras y me niego a abrir los ojos. ¿Para qué? Ya no hay nada que me interese ver.
-Nimm, por favor.


Permanezco inmóvil como si con eso pudiera detener el tiempo, como si eso me hiciera olvidar. Un día fuí como ella, tan hermosa, tan feliz. Nadie lo adivinaria viendome ahora, sucia, cansada, siendo humana.


No puedo entender que es lo que me atrajo de los hombres, seres egoistas que niegan aquello que no conocen y rechazan lo que pueda hacerles sombra. Tienen miedo, siempre tienen miedo de algo y lo más curioso es que es a sí mismos a quienes mas temen, y no les faltan motivos para ello.


Aún me sorprende sentir el ligero cosquilleo que provocan mis lagrimas al resbalar por las mejillas. Las hadas no lloran, no tienen motivos.
Esperaba que el Consejo denegase mi petición pero eso no lo hace menos duro. Enamorarse de un mortal es lo único que nos estaba prohibido y es precisamente lo que hize, rechazando a los de mi raza y abrazando a aquellos que ni siquiera supieron valorar el gesto.


Ahora no soy nada, me niego a ser humana y no puedo volver con las hadas. No tengo nada por lo que luchar, nada que me haga feliz y sin embargo respiro, y ese es sin duda mi peor castigo. 


Ella sigue intentando hacerme reaccionar pero no lo hace por amor, ni siquiera por afecto, lo hace porque siente lastima, y un irreprimible deseo de ayudar, como todas las hadas. Debí haber escuchado a mi maestra, debí haberla creído cuando me dijo que jamas conseguiria que me quisieran, que el hombre reserva tanto amor para si mismo que no le queda nada que dar. Ahora es tarde, aposté y lo perdí todo.


Pienso todas aquellas veces que serví a los humanos. como hada, les guié cuando estaban perdidos, les iluminé el camino en la noche y les ayudé a dar solución a sus problemas... Ellos ni siquiera creían en mi.
A pesar de todo quise ser como ellos, les amaba. Seguí haciendoles bien, pero ellos no me veían, no se molestaban en mirar, concentrados como estaba
n en escuchar sus lamentos no eran capaces de oír los míos.


No pertenezco a ningú sitio, no soy igual a nadie y estoy sola, el mundo no esta hecho a mi medida, yo no encajo aqui y sin embargo de alguna manera, aqui estoy.

Camino


Tropiezo y caigo
pero el mundo sigue girando,
no se ha parado conmigo.
Me pierdo, no se a donde ir
los demas avanzan
algunos incluso se detenienen
y me miran, pero luego prosiguen
su camino.
Yo sigo estando sola.
Entonces le veo, es él
me pongo en pie,
corro a su encuentro y camino
cada vez mas rapido
y no se a donde me dirijo
pero no me importa, ya no me importa.
No puedo detenerme y eso me hace feliz
no quisiera tener que dejarle.
Tropiezo y el evita que me caiga
el mundo sigue girando, y yo
cogida de su mano,
giro con el.

No puedo seguir sola de nuevo... Y tu lo sabías. Pero aun así soltaste mi mano y me dejaste caer de nuevo. Pese al daño que me has hecho, sigo esperando que vuelvas sigo esperando que suene el telefono, que llamen a mi puerta, y que seas tu. 
Tu me enseñaste el unico camino que quería seguir... 

viernes, 1 de abril de 2011

¿Por que?

Esto no debería haber pasado... Tu dijiste que sería para siempre.
¿Te acuerdas? 
Dijiste que me querías y ahora....
¿Que es lo que a cambiado?
No puedes irte... Lo prometiste, tu dijiste que no me harías daño
¿Te acuerdas?
Dijiste que no ibas a hacerme sufrir
Así que no puedes irte... 
¿Vale? 
Yo te lo he dado todo y ahora me pides que siga yo sola...
no puedo hacerlo sin ti...
no me queda nada sin ti... 
¿Por que te vas? 
Tu para mi siempre has sido lo primero,
hubiera pasado la vida entera contigo
te quiero tanto...
Si no lloro  es porque no me lo creo
No has podido dejar de quererme... 
Yo te lo he dado todo y ahora me pides que siga yo sola...
no puedo hacerlo sin ti...
no me queda nada sin ti... 
¿Por que te vas? 
Ahora voy a cerrar los ojos
voy a pretender que nada de esto es real
voy a pretender que tu no te has ido
voy a sentarme y a esperar
Porque vas a volver... ¿Verdad?

jueves, 31 de marzo de 2011

Duele

Duele vivir sin ti... Pero aún duele más sentirte a mi lado sabiendo que por mucho que intente engañarme, no me quieres. Duele asumir que has luchado para nada, que lo has hecho todo por alguien que no daría nada por ti... duele ver como todas tus esperanzas se desvanecen y como, de pronto, sientes frío, y no el tipo de frío que puedes sentir en las noches de invierno, sino el frío que siente quien lo a perdido todo y de pronto, esta sola. 




Te hubiera querido toda la vida... Si me hubieras dado la oportunidad.